Nace en Montevideo (Uruguay) el 24 de octubre de 1986.
Pintor, escultor y decorador. Estudió en el Círculo de Bellas Artes con el pintor Carlos María Herrera (Montevideo, Uruguay).
1910- Visitó centros artísticos europeos.
1912- Estudió en la Academia Brera de Milán, Florencia y Roma (Italia); en París (Francia) y España, becado por el Ministerio de Instrucción Pública de Uruguay.
1921- Regresó a Montevideo (Uruguay).
1923- Fue nombrado profesor de dibujo y decoración en la Escuela Industrial; de dibujo y pintura en el Círculo de Bellas Artes y en los Institutos Normales, cargos en los que realizó una intensa labor docente (Montevideo, Uruguay).
Premios:
1930- Premio Ministerio de Instrucción Pública en la Exposición del Centenario de la Independencia del Uruguay.
1940- 1er y 3er Premio en el Concurso de Afiches sobre el deporte, organizado por la Comisión del Centenario; MEDALLA DE ORO y Premio Veredicto Popular por su escultura “El Boxeador” (arte que comenzaba a practicar) en el Salón Municipal (Montevideo, Uruguay).
Premios en Salones Nacionales:
1949- Mención Medalla de Bronce por su yeso “Oscar” en el XIII Salón Nacional de Pintura y Escultura (Montevideo, Uruguay).
1950- Mención Especial Medalla de Bronce por su yeso “Maternidad”, en el XIV Salón Nacional de Pintura y Escultura (Montevideo, Uruguay).
1951- Mención Medalla de Bronce por su yeso “Estudio” en el XV Salón Nacional de Pintura y Escultura (Montevideo, Uruguay).
Integró el movimiento planista junto a José Cúneo Perinetti, Carmelo de Arzadun, Alfredo De Simone y Petrona Viera.
Se dedicó al diseño gráfico, así como al diseño de vestuario y escenografías de teatro y carnaval, trabajo en estas disciplinas con grandes especialistas. Fue decorador y escenógrafo en teatros oficiales e independientes y en la Casa del Arte fundada en 1928 (Uruguay).
Fue el autor del afiche del Primer Campeonato Mundial de Fútbol, celebrado en Uruguay en 1930.
Fue un gran divulgador de sus principios: una pintura sintética, de planos recortados, colores brillantes y exaltada luminosidad. Su Retrato de Luis E. Pombo (crítico de arte y amigo del artista) es considerada una de las pinturas más emblemáticas del arte uruguayo, audaz en su tiempo en composición y manejo del color.
Falleció el 13 de mayo de 1940.
La muerte lo sorprendió cuando daba término a los bocetos escenográficos correspondientes a “La Condenación de Fausto”, ópera que había sido programada para la temporada de 1940 en el SODRE (Uruguay).
Está representado en los Museos Nacional y Muncipal de Bellas Artes, Instituciones Estatales, Galerías y colecciones privadas del Uruguay y otros paisas de América y Europa.
