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Torres, Denry
Nace en Montevideo (Uruguay), el 2 de Marzo de 1923. Autodidacta de formación.
Exposiciones Individuales:
1946- Asociación Cristiana de Jóvenes, Montevideo (Uruguay).
1950- Ateneo de Montevideo (Uruguay).
1958- Galería “Antelo”, Montevideo (Uruguay).
1963- Centro de Artes y Letras del Diario “El País”, Montevideo (Uruguay).
1965- Galería “Porley”, Montevideo (Uruguay).
1966- Galería “Lirolay”, Buenos Aires (Argentina).
1967- Galería “U”, Montevideo (Uruguay).
1969- Galería “Día”, Montevideo (Uruguay).
1969- Galería “Día”, Punta del Este (Uruguay).
1970- Galería “Día”, Montevideo (Uruguay).
1970- Galería “Día”, Punta del Este (Uruguay).
1970- “Bar de Montero”, Montevideo (Uruguay).
1973- Galería “Trice”, Montevideo (Uruguay).
1974- Galería “Trice”, Montevideo (Uruguay).
1975- Galería “Trice”, Montevideo (Uruguay).
1976- “Club de Arte”, Montevideo (Uruguay).
1976- “Club Oggi”, Montevideo (Uruguay).
1977- “Club Oggi”, Montevideo (Uruguay).
1978- “Club Arno”, Montevideo (Uruguay).
1979- “Club Arno”, Montevideo (Uruguay).
1982- Galería de Arte Portón de San Pedro, Montevideo (Uruguay).
1984- Galería de Arte Portón de San Pedro, Montevideo (Uruguay).
1985- Galería de Arte Portón de San Pedro, Montevideo (Uruguay).
Exposiciones Colectivas:
1942-1960- Participa en el Gran Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1961- Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1961- “Arcobaleno”, Punta del Este (Uruguay).
1961- “Amigos del Arte” 17 Pintores, Punta del Este (Uruguay).
1961- “Argentino Hotel” 12 Pintores Uruguayos, organizado por la Comisión Nacional de Bellas Artes, Piriápolis (Uruguay).
1962- “26 Artistas Uruguayos”, Comisión Nacional de Bellas Artes (Uruguay).
1962- Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1962- “Pintores Figurativos de Hoy”, Comisión Nacional de Bellas Artes (Uruguay).
1963- “1ª Feria Nacional de Artes Plásticas”, Montevideo (Uruguay).
1963- Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1963- “1er. Salón de Pintura” del Automóvil Club del Uruguay, Montevideo (Uruguay).
1964- “2ª Feria Nacional de Artes Plásticas”, Montevideo (Uruguay).
1964- Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1964- “Feria del Libro y el Grabado”, Uruguay.
1965- Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1965- “Feria del Libro y el Grabado”, Uruguay.
1966- Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1966- “Feria del Libro y el Grabado”, Uruguay.
1967- “Feria del Libro y el Grabado”, Uruguay.
1967- Participa en Salón Nacional de Artes Plásticas (Uruguay).
1967- “18 Talentos”, Banco de Londres y América del Sur, Galería “U”, Montevideo (Uruguay).
1968- “Denry Torres y M. Bresciano en Galería U”, Montevideo (Uruguay).
1971- “1ª Bienal de Artes Gráficas”, Cali (Colombia).
1972- “Denry Torres, Alceu Ribeiro y Manolo Lima” organizada por Galería de Arte Portón de San Pedro, en la Asociación Cristiana de Jóvenes de Montevideo –Sala de Artes Visuales- (Uruguay).
1975- Galería Oggi, Montevideo (Uruguay).
1976- Galería Mobel, Alliançe Francaise (Uruguay).
1977- Galería Ceriani (Uruguay).
1978- Galería Ceriani, Galería Múltipla y Galería Arno (Uruguay).
1979- Galería Nuestro Taller, Centro Metropolitano de Arte, Galería Múltipla y Galería Ceriani (Uruguay).
Premios y Distinciones Obtenidos:
1944- Premio Concurso de Libros de Literatura Ilustrados, Consejo Nacional de Enseñanza Primaria y Normal Uruguay.
1946- Premio Adquisición, Salón Municipal de Pintura de Montevideo (Uruguay).
1948- Premio Adquisición, Salón Municipal de Pintura de Montevideo (Uruguay).
1964- Premio Cámara de Representantes, Salón Nacional de Bellas Artes (Uruguay).
1966- Premio Comité Central Israelita, Salón Nacional de Bellas Artes (Uruguay).
1967- Reproducción de una obra en Sellos Postales, “Homenaje a Cervantes”, Correo Central (Uruguay).
Bibliografía:
- “Fine Artes Philatelist”, Volumen 13 Nº 5.
- “Diccionario de Arte Americano”.
- “Plásticos Uruguayos”, Biblioteca del Poder Legislativo (Uruguay).
- “12 Artistas”, María Luisa Torrens (Uruguay).
Museos e Instituciones que poseen sus Obras:
- Museo “Juan Manuel Blanes”, Montevideo (Uruguay).
- Museo Nacional de Bellas Artes, Montevideo (Uruguay).
- Asociación Cristiana de Jóvenes de Montevideo (Uruguay).
- “Ateneo” de Montevideo (Uruguay).
- Comité Central Israelita del Uruguay.
- Banco de Londres, Montevideo (Uruguay).
- Banco Pan de Azúcar, Montevideo (Uruguay).
- Banco Caja Obrera, Montevideo (Uruguay).
- Banco Comercial, Casa Central Montevideo (Uruguay).
- Embajada de la República Argentina en Montevideo (Uruguay).
Falleció en la ciudad de Montevideo en el año 1983.
Sus obras se encuentran en colecciones particulares de: Uruguay, Argentina, Brasil, Chile, México, USA, Canadá, España, Alemania, Israel y Japón.
"Los Bares de Denry Torres", por Julio César Castro Diario "La República" (13/01/02).
Una escena de bar montevideano pintada por Denry Torres me da ganas de tomarme un café mirando la calle por una ventana, sin hablar con nadie, viendo pasar a la gente que va y viene con sus caras. Entro a un bar al que nunca antes. Desganado, el mozo pasa el trapo húmedo por la mesa y yo digo simplemente un café por favor, y él pregunta agua o soda. No debió preguntar nada. Yo pedí un café y punto. Ahora tengo que pensar qué prefiero, si agua o soda, y dudo porque tanto me da agua como soda, y sin pensarlo le digo mitad y mitad. Es un chiste, apenas un chiste inocente y algo bobo, pero me vino y se lo dije y esperé que el mozo se sonriera y fuera a buscar el cafecito, pero no, el tipo apoya el filo de la bandeja en la silla que está frente a mí y me mira fijo. Tengo miedo de que me pegue con el trapo. No debí hacerme el gracioso, el tipo está trabajando y me lo dice, estoy trabajando, señor, y yo le digo que no quise molestarlo y él me dice que sabe perfectamente que no, pero sabe qué pasa, dice, que hay momentos y momentos. Levanta una ceja. Le miro la mano del trapo. Si no me pegó ya, ya no me pega. Hace algo que puede ser peor. Se sienta frente a mí y me sigue mirando sin bajar esa ceja. Hay momentos y momentos, remarca, y usted no la embocó porque para mí este no es un buen momento. Sonamos, pienso, y abro la boca para disculparme pero él me detiene con un gesto lento pero firme y me dice, le explico. Siempre que alguien me dice "le explico", tiemblo, porque todas las explicaciones son largas y me aburren. No vine al bar a que nadie me explique nada, pero este señor no sólo se sentó a mi mesa, mi mesa, sino que además me explica. Llevo veintitrés años trabajando en este boliche, veintitrés. Baja la ceja pero al instante sube las dos, cosa que le hace arrugar el seño y le pone los ojos grandes. Veintitrés, repite sin distender la frente ni normalizar la mirada, y cuando entré aquí tenía cuarenta años, cuarenta, así que hágase una idea. No sé qué idea pretende que me haga este tipo al que no hice más que pedirle un café y ahora lo tengo instalado en mi mesa. Miro a los costados como para pedir auxilio y compruebo que las otras están vacías, salvo aquella del rincón donde una parejita se hace arrumacos y comparte una coca cola y vaya a saber qué sueños, qué proyectos sobre el futuro y demás pamplinas que oyeron o leyeron por ahí y ahora repiten, como repetimos todos, alguna vez. El mozo me da tiempo, deja que mire, y me pregunta: ¿vio? En aquella mesa, señala, conocí a la que hoy es mi mujer. Era, rectifica, y un ojo se le pone brilloso como para llorar. Me llama la atención que el otro ojo se le mantiene seco. Puede ser un problema en los lagrimales, o un llanto controlado mediante un fuerte dominio de las emociones, un ojo sensible y el otro duro, uno entregado al dolor y el otro alerta por cualquier cosa. Conocí un tipo que movía las orejas a voluntad, las dos a un tiempo o una por vez, como pequeños abanicos, pero las orejas son otra cosa, las orejas no lloran. El mozo me explica que la mujer se le fue hace una semana, que llega a la casa y si escucha un tango se desparrama, que en ese momento, ahora, le duelen los pies, que es inhumano obligar a los mozos a trabajar hasta doce horas de zapatos, que ese boliche lo cierran mañana porque se fundió y él se queda sin laburo, y a mi edad, y solo, hágase una idea, como para chistes está uno. La parejita le chista, el mozo se para, apoya una mano en mi hombro, sin mirarme repite, veintitrés años, me palmea apenas y va hacia la mesa de los arrumacos. De vuelta en mi casa me preparo un café. Me siento frente al teclado. No se me ocurre nada. Para peor, me llora un ojo. *
Julio César Castro (Juceca) Humorista y columnista
"Sello Homenaje a Cervantes", expedido por el Correo Aéreo (Uruguay, 1970).
Product ID | Uruguay C356 |
Description | Uruguay C356, MNH. Michel 1158. New Year 1970: Don Quixote and Sancho Panza, painted by Denry Torres. |
Denry Torres: Soledades y cafés en Galería Portón de San Pedro (Mundocolor, 16 de Agosto 1981).
Denry Torres nació en Montevideo el 2 de marzo de 1923.
Hoy expone en la Galería Portón de San Pedro, continuando con un largo itinerario de exposiciones individuales y colectivas que se inició en 1946 en la Asociación Cristiana de Jóvenes. Sus obras integran los museos Juan M. Blanes y Nacional de Bellas Artes en Montevideo, de Artes en Santiago de Chile; colecciones de Alemania, Argentina, Canadá, Chile, Israel, Japón, México, Uruguay, USA, y Venezuela.
Denry Torres no elude la figuración para representar sentimientos que dominan sobre lo anecdótico en el recorrido de sus obras: soledad, lucha, frustración. Toma el tema del café, tan representativo de Montevideo y lo repite en escenas en las que el hombre aparece clavado en su situación. Los árboles de anteriores épocas de este pintor aludían con sus copas de líneas quebradas a seres humanos de enraizada soledad, hoy las cabezas levantadas sobre la mesa del bar, repiten la forma de aquellas copas estilizadas, fijas también en puntos irreconocibles del tiempo o del espacio. En el café, los hombres y mujeres parecen igualmente estancados, inmovilizados, cortados o detenidos en su camino. Tiempo podría ser el tema fundamental de toda esta colección que con composición esquematizada se presenta en casi todos los casos con luz de amanecer. Desde las mesas vacías hasta el interminable humo de las horas en la engañosa compañía del alcohol, es esa otra dimensión del entremundo la que cuenta para los personajes del mundo de Denry Torres.
Entona los colores con oficio y con audacia, inundando el cuadro con una luz abstracta, inventada, de tal manera que pintura y luminosidad parecen identificarse en la creación de una atmosfera distinta. Es esta la principal cualidad de la obra de Denry Torres en esta entrega. Sus cuadros son hechos de un resplandor de colores y pintan la quietud obligada de la existencia que se rebela casi inútilmente contra la realidad cotidiana y busca refugio en los cafés. Y esto no es más que la angustia moderna vivida por el hombre en la ciudad.
Denry Torres: por Eduardo Vernazza (El Día 15 de agosto de 1981)
Denry Torres anticipaba desde tiempo esto que hoy concreta con la factura y la serie de una temática fascinante, que tiene en un cuadro de café solitario, el expediente más importante de toda una muestra que alberga la calidez de sus personajes, en el Portón de San Pedro.
No de otra manera estos se mueven o se aquietan frente a un mostrador. O juegan a las cartas, y quedan entre el aire cargado frente a las copas o la taza de néctar negro.
Torres afluye a dicha motivación porque conlleva con ella todo el andar por ese recinto plástico, donde cada tipo descarga su gesticulante manera de ser, o se agrupa con la pálida vigencia de una composición que aparece por momentos extraña, llevada quizás al grotesco, al expresionismo, sin caer empero en la abrumadora sensación que moleste.
Denry Torres sabe de pintura. Así lo afirma su trayectoria que incluye obras con otro destino, como el paisaje, los rincones de férreos ocres, y azules de densa vitalidad.
Todo ese bagaje le sirvió para adelgazar el color y mantener la fuerza del dibujo, que encarna a sus personajes confirme aplomo.
Las escenas se renuevan como en serie. Cada tela es una versión de un momento especial que se lleva dentro de esas cuatro paredes viejas, ahumadas por los años, y que Torres las vuelve nuevas dentro de su importante aporte pictórico. Tiene aciertos de solida ambientación, de expresionista vigencia, donde cada tipo encuentra su carácter, su humana forma plasmada, o se descubre como integrante de un conjunto con artistas populares, pero que se manifiesta en su nítida riqueza de color.
Denry Torres: Mostradores de mármol (El País, agosto 1981)
En la Galería Portón de San Pedro se ha montado una singular doble exposición: 22 cuadros de Denry Torres en el subsuelo, y otros tantos de Casimiro Motta en el piso superior. He aquí las confesiones sobre sus obras y las que de aquel con quien comparten la muestra.
No se trata de copias de boliches montevideanos, explica Denry Torres, busco dar la esencia de esos lugares. Trato de evitar el pintoresquismo, busco dar el hombre corriente. Es un tema viejo, que he cultivado ya.
Denry Torres, 58, autodidacta de larga y dilatada obra no es afecto a hablar de su arte. Reconoce que su pintura tonal es de paleta baja y que allí pueden encontrarse los vestigios de alguna lejana influencia del Taller de Torres García. No sé cómo calificar mi manera de pintar, expresa.
Por otro lado, Amalia Polleri le ha definido como un artista “que cumple con el difícil desafío de hacer realismo sin hacer naturalismo”. El no comenta el juicio. Y, hablando de sus cuadros en exposición, admite: Trato de dar esa atmosfera gris y tediosa de los bares. No se trata de los bares modernos ni aquellos que ya están en vías de extinción sino un mundo más corriente, que definen esos largos mostradores de mármol que no tienen mucho carácter.